La energía fotovoltaica quiere entrar en aguas más profundas

La compañía vizcaína Emica Solar instaló hace dos años un parque flotante de placas solares en Miñano, parque tecnológico de Álava. El balance es bueno y quieren bucear en más aguas, hasta los embalses. El mar se ve a lo lejos.

Emica-Solar - Parke Tecnologia Araba - energia fotoboltaikoa
Argazkia: Emica Solar
[berria]

Uno de los aspectos negativos de la energía fotovoltaica es que se tienen que ocupar grandes zonas y no se puede utilizar para otra cosa. De forma similar ocurre en los estanques y embalses, donde es difícil sacar provecho de la superficie. Hace una década el sector de las energías renovables vio que combinando estos dos problemas se podía sacar porovecho y empezaron a instalar parques de placas solares flotantes. Desde entonces, la cantidad de energía así producida ha aumentado enormemente.

Jon Ander Agirrebengoa, director de Emica Solar, ha dado a conocer los datos: en 2015 en el mundo sólo había diez megavatios fotovoltaicos instalados en el agua; cinco años después, se superó la barrera de los dos gigavatios. Es decir, se multiplicó por doscientos la capacidad.

Actualmente hay instalados cuatro terawatt, cuatrocientos veces más que al principio. En términos de dinero, se prevé un volumen de negocio de 270 millones de dólares para este año y se calcula que superará los 1.200 millones de dólares para el año 2033.

Emica Solar es una rama de la empresa vizcaína Emica Bombas especializada en instalaciones de parques fotovoltaicos flotantes. Hace casi dos años realizaron su primera instalación, en Miñano, en el parque tecnológico de Álava. El gerente de Emica, Mikel López de Lacalle, se ha mostrado satisfecho con los resultados obtenidos hasta el momento y ha contado que el modelo ha sido exportado al extranjero. Especialmente, al sur de España. Allí, los estanques son más y más grandes que en el País Vasco, y las horas de sol también son más abundantes. "Es un lugar idóneo para crecer porque tiene una gran potencialidad y una mayor necesidad".

En 2025 esperan expandirse aún más. Por primera vez, está previsto que se facture un millón de euros. Para hacer frente a la demanda, se ha ampliado capital, participando, entre otros, la Diputación Foral de Bizkaia y el Gobierno Vasco. "Hemos apostado por esta tecnología y por Emica porque es acorde con los valores del gobierno. Más industria, mejor tecnología, y menos emisiones", razona la viceconsejera de Transición Energética, Irantzu Allende. El Gobierno Vasco ha aportado 250.000 euros.

De Lacalle ha anunciado que con mayor capital tendrán la oportunidad de mejorar sus productos. "La competencia es cada vez mayor y también más brutal. Tenemos que conseguir que la calidad nos diferencie". También quieren ampliar el equipo de trabajo y llegar a más clientes.

No quieren prisas

Hasta el momento, las instalaciones se han realizado en estanques, aunque Agirrebengoa no ha descartado que en los próximos años se instalen en algún pantano del País Vasco. "Pueden ser muy buenas opciones. Se están realizando estudios y dando los primeros pasos, pero están en fase de inicio, y la normativa también es muy reciente. Este año será difícil ver el primer proyecto, pero tenemos que empezar a trabajar". No obstante, Agirrebengoa ha subrayado que Emica no diseña ningún proyecto, sino que es proveedor.

Indica que no hay que tener prisa y que antes de entrar en aguas profundas hay que nadar en la superficie. «A pesar de tener aquí capacidad para realizar proyectos de doce megavatios, lo primero que hay que hacer son proyectos de un megavatio. Y para producir un megavatio, primero hay que producir cien kilovatios. Hay que ir paso a paso».

100 Kilovatios:

Esta es la capacidad de producción de la planta fotovoltaica flotante de Miñano. Es decir, tiene la capacidad de satisfacer el consumo de 35 viviendas a través de casi doscientos paneles divididos en dos grupos. Así se ha conseguido el 30% de la demanda energética del edificio principal del parque tecnológico.

El salto a los embalses lleva tiempo, y ni Agirrebengoa ni De Lacalle han mencionado el mar. Sin embargo, en algunos países también se han iniciado ensayos en asentamientos marinos. El oleaje del mar sigue siendo un reto a superar y las primeras pruebas se están llevando a cabo en zonas tranquilas.

El funcionamiento de las placas solares flotantes es el mismo que el de los paneles situados en los campos de cultivo o en los tejados. Los paneles absorben la luz solar, con la consiguiente liberación de electrones. Al moverlos, se produce la corriente de electricidad. Esta corriente se recibe y se envía a la red general para cubrir las necesidades del usuario.

VENTAJAS

Comodidad. El montaje y desmantelamiento de las instalaciones es "sencillo y ágil".

Eficiencia. Las placas solares absorben más energía porque el polvo les afecta menos y no calientan tanto.

Lugar. No ocupa suelo destinado a otros usos, principalmente agrícolas.

Agua. Los paneles solares funcionan como cubiertas, lo que hace que la masa de agua que se evapora sea menor. "En las sequías tiene especial importancia. Hay estudios que dicen que se impide evaporar 1.250 millones de metros cuadrados ".

Biodiversidad. Protege algunas especies animales. Gracias a la sombra que forman los paneles solares, desaparece una de las principales causas de la contaminación en embalses y lagos: el desmesurado crecimiento de las algas. Sin embargo, un estudio realizado por la universidad estadounidense de Cornell concluyó que los vertidos que aceleran el efecto invernadero aumentan en los embalses cubiertos y disminuyen la cantidad de oxígeno que almacena el agua.